El sueño de Miguel Curiel se cumplió. Aunque le pidieron que no pose con la camiseta de Alianza recién hasta la presentación oficial de hoy, el nuevo delantero blanquiazul no aguantó tanta emoción junto a su familia.
“En Alianza me sentiré en familia porque es un club del pueblo, alegre y con mucha tradición. Eso es bueno para mí, porque vengo de una familia de pueblo”, dijo el ex delantero de Sport Boys.
Como ya se había adelantado desde hace semanas, Curiel venía negociando con Alianza. Hasta que recién ayer se cerró el trato. La resolución de su contrato con Boys se hizo oficial por la tarde y, de esa manera, el delantero de 22 años pudo firmar.
Ante la ausencia de José Carlos Fernández, Curiel sabe que tiene que esforzarse, aunque no se presiona. “Yo no vengo a reemplazar a nadie. Llego a escribir mi propia historia en Alianza. Sé que tengo que ir de a pocos”, sostuvo la ‘Jirafa’.
¿Su chapa es tallarín?
Curiel admitió que tuvo una oferta del Juan Aurich, pero que se decidió por Alianza. “Ya había dado mi palabra”, dijo, y su mamá Noemí lo interrumpe: “Ojalá mi hijo llegue a la selección. Defender a la patria no tiene precio”.
Su madre reveló, entre bromas, que su hijo “es grandote porque le gusta comer bastante tallarín, ají de gallina y hasta sobras”. Esa podría ser su chapa: tallarín, por lo espigado, aunque no le desagrada ‘Jirafa’ o ‘Manguerita’. A Curiel, por ahora, solo le importa romperla con Alianza.
Por Rodas y por Cruzado
El anuncio de ‘Pocho’ Alarcón era cierto: “Contrataremos a tres refuerzos para la liguilla”. Y a la llegada de Curiel, no solo se podría sumar la de La Torre, sino también la de Ángelo Cruzado o Gerardo Gárate.
Estos nuevos nombres se han estado manejando bajo siete llaves al interior de la Comisión de fútbol. Sin duda, la prioridad de la dirigencia es reforzar el ataque, y por eso se apura todo.
Además, los íntimos ya tendrían un acuerdo con Gustavo Rodas para el 2011. Es que el ‘10’ argentino de León de Huánuco no puede jugar la liguilla por Alianza, por el cupo de extranjeros. Ojo que el Aurich se lo quiere quitar.
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